En cuestión de meses, la dinámica de los vecinos se modificó completamente en San Cayetano. Según dijeron a LA GACETA, observan con asombro cómo el miedo quedó atrás desde que un policía los custodia desde la garita instalada en la esquina de Anselmo Rojo y Thomas Edison, una zona considerada “roja” tanto por la gente del barrio como por las fuerzas de seguridad.

Quienes viven allí afirmaron que dejaron de escuchar gritos de víctimas de arrebatos, que los grupos de jóvenes que solían reunirse en la esquina para consumir estupefacientes desaparecieron y que hasta mejoró la higiene, ya que se dejó de arrojar montañas de basura en la vía pública.

“La presencia es buena, cesaron un montón los robos en la cuadra. Esta era la esquina favorita por los delincuentes para robarles a los taxistas, arrebatar celulares y tirar basura”, relató Juan Rafael Villarreal, quien destacó que todo eso parece haber quedado atrás. “La gente se siente más tranquila”, afirmó.

Una mirada similar es la de Claudia Mohamed: “El cambio es total. Acá robaban todas las siestas, todo el tiempo se estaban drogando en la esquina y eso no pasa desde que está la garita. Antes vivía preocupada porque mi hija sale a las 4 de la mañana para ir a trabajar al Mercofrut, pero ahora estamos tranquilos porque ellos (los policías) siempre están ahí”.

GIRO DE 180°. Ya no hay robos ni drogas, dice María Vázquez.

“Antes robaban mucho por acá y se amontonaba la basura”, agregó también María Vázquez. Y confesó: “Yo salía siempre con miedo, pero ahora una se siente más segura”. De igual manera se expresó Delfina González, que además celebró los recorridos preventivos que suele realizar la Policía en ese sector: “Acá cambió todo, especialmente por el ‘trencito’ que pasa todos los días. Está muy bien que lo hagan”, opinó.